Frases destacadas
He preparado para ti cinco frases que, como destellos, pretenden abrir camino a la presentación de la novela.
- “La verdadera riqueza de un pueblo está en la memoria de
quienes trabajaron sin esperar recompensa.”
- “Los que emigraron llevaron consigo un pedazo de Asturias,
pero los que se quedaron cargaron con la soledad del silencio.”
- “La vida en la aldea se mide en estaciones, nacimientos y
despedidas, más que en años.”
- “En la sombra también crece la dignidad.”
- “Cada nombre olvidado es una derrota de la memoria
colectiva.”
Xente na Sombra, de Julián Fernández Montes, es mucho más que
una novela, es un acto de memoria y gratitud hacia todas esas existencias
humildes que rara vez encuentran espacio en la literatura. Con una prosa
sencilla y honesta, el autor rescata la vida de sus antepasados en el concejo
de Nava, y nos conduce al corazón de la Asturias rural de los siglos XIX y XX, donde las
casas de aldea, las escuelas unitarias, el trabajo en el campo y la emigración
conformaban el tejido de la vida cotidiana.
El protagonista, Pepe, se convierte en la voz de tantas
generaciones que crecieron en la escasez, lucharon con dignidad y afrontaron
las ausencias que dejaban quienes marchaban a América o en busca de su destino. La narración
transcurre entre escenas de trabajo agrícola, veladas familiares y silencios
cargados de dolor, dibujando un mapa íntimo de lo que significa vivir en
comunidad y, al mismo tiempo, soportar la soledad de quienes esperan el regreso
que nunca llega.
La fuerza de la obra reside en su autenticidad: no hay
artificio literario, ni adornos innecesarios, sino verdad y emoción en estado
puro. Julián escribe desde la cercanía afectiva, con la mirada
de quien ha heredado esas historias y siente la responsabilidad de
preservarlas. En ese sentido, la novela es un testimonio colectivo tanto como
un relato personal: una crónica de la dignidad de quienes permanecieron en la
sombra, invisibles para la historia oficial, pero imprescindibles para la vida
de sus pueblos.
El hecho de estar escrita en bable le otorga un valor
añadido. No solo recupera una lengua minoritaria, sino también un modo de
nombrar y de sentir el mundo. Cada palabra, cada giro idiomático, conecta con
la tierra y con la memoria oral de las aldeas, reforzando el carácter
identitario de la obra. El asturiano no es aquí un simple vehículo, sino parte
esencial del mensaje: reivindicar lo propio, lo que ha sido silenciado, igual
que esas gentes a las que da voz.
Así, Xente na Sombra es, a la vez, un relato íntimo y
colectivo, donde las pequeñas historias iluminan la gran historia de todos los
que vivieron en silencio. Es una invitación a detenernos, a mirar hacia atrás y
reconocer la herencia invisible de quienes labraron la tierra, sostuvieron a
sus familias y afrontaron el desarraigo sin renunciar nunca a la esperanza. Una
novela que, sin recurrir a gestos grandilocuentes, consigue emocionar y dejar
huella, porque nos recuerda que en la sombra también crece la dignidad.
L. J. Pruneda
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